La concejala del MAS en El Alto, Wilma Alanoca, y el exgerente candidato a la alcaldía de La Paz, César Dockweiler, negaron, por separado, las acusaciones que hizo el ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, de estar vinculados a grupos de choque para ocasionar desmanes en contra del congreso “arcista”.
Ambos, pertenecientes a la facción que apoya a Evo Morales, fueron relacionados por haber sostenido conversaciones telefónicas con tres personas, que fueron aprehendidas por la Policía, bajo la sospecha que pretendían crear desmanes en ese encuentro político.
Alanoca descartó estar involucrada en las acusaciones y dijo que tiene “toda la libertad de transitar y reclamar” en cualquier parte contra el Gobierno por la situación que atraviesa el país.
“Lo que usted hace realmente cae en saco roto, este señor (el Ministro de Gobierno) no sirve, así debería dedicarse usted a buscar al narcotraficante (Sebastián) Marset y no perseguir a la gente inocente”, añadió.
Dockweiler, por su lado, consideró las acusaciones de Del Castillo como una “falsedad enorme” y una mentira que están orientadas a un proceso de presunta persecución política contra quienes piensan diferente al Gobierno.
En su caso, sospecha que los ataques a su persona se deben a que en las últimas semanas realizó críticas de un supuesto sobreprecio al crédito de $us 62 millones para el proyecto del teleférico.
“Entonces, han inventado una serie de cuentos para involucrarme y meterme en esa persecución política y tratar de amedrentarme, seguramente para intentar acallar mi voz, pero nada de eso va a ocurrir”, añadió.
Alanoca incluso desafió a Del Castillo de intentar detenerla.//ERBOL