viernes, febrero 28

Enfermero varón: Rompiendo estereotipos de género en la profesión de la salud

ENFERMERO

La inclusión de hombres en la enfermería no solo desafía prejuicios, sino que también fortalece la atención sanitaria en América Latina y el Caribe.

La enfermería, una de las profesiones más vitales en el ámbito de la salud, ha sido históricamente asociada con roles femeninos, dejando a los enfermeros varones en un segundo plano. Sin embargo, esta percepción está cambiando, y con razón: la diversidad de género en esta profesión no solo es necesaria, sino que también enriquece la calidad de la atención médica.

Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), a nivel global, las mujeres representan el 87% del personal de enfermería, mientras que los hombres apenas alcanzan el 13%. Esta brecha, aunque varía según la región, refleja un estereotipo que limita el potencial de la profesión. En América Latina y el Caribe, donde se estima que se necesitarán alrededor de 8 millones de enfermeros adicionales para 2040, según el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la inclusión de más hombres en este campo es crucial para satisfacer la creciente demanda de profesionales de la salud.

Desafíos y oportunidades para los enfermeros varones

Milena Arroyo, Decana de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad Franz Tamayo (Unifranz) en El Alto, Bolivia, destaca que la enfermería ha evolucionado significativamente. “Ya no se trata solo de curar heridas o administrar inyectables. Hoy, la enfermería es una profesión con fundamento científico, que incluye liderazgo, investigación y especialización”, afirma Arroyo. Sin embargo, los enfermeros varones aún enfrentan estereotipos y barreras culturales que pueden desalentar su ingreso o permanencia en la profesión.

Arroyo enfatiza la importancia de visibilizar el valor de la enfermería y el liderazgo que los profesionales, independientemente de su género, pueden ejercer en el sistema de salud. “Es fundamental mostrar que tanto hombres como mujeres pueden ocupar cargos de jefatura, gerencia y liderar proyectos”, añade.

La diversidad de género como pilar de la atención sanitaria

La inclusión de enfermeros varones no solo desafía los estereotipos de género, sino que también aporta beneficios concretos a los equipos de salud. Según Arroyo, los hombres suelen destacar en áreas como quirófano, terapia intensiva y urgencias, donde la fuerza física y la capacidad de movilización son esenciales. “Su aporte desde otra perspectiva es fundamental para la planificación de cuidados de enfermería”, señala.

Además, la diversidad de género en la enfermería refleja la pluralidad de la sociedad y mejora la calidad de la atención. Los pacientes se sienten más cómodos y comprendidos cuando son atendidos por profesionales con los que comparten experiencias y contextos similares. Esto no solo fomenta un ambiente de trabajo más equilibrado, sino que también enriquece las dinámicas de los equipos de salud.

Hacia una enfermería más inclusiva y eficaz

La enfermería es una profesión que requiere vocación, empatía, dedicación y habilidades técnicas, cualidades que no están determinadas por el género. Reconocer y valorar la contribución de los enfermeros varones es esencial para promover una mayor equidad y diversidad en el campo de la salud. Al hacerlo, no solo se fortalece la profesión, sino que también se garantiza una atención médica más completa y representativa para todos.

En un mundo donde la demanda de profesionales de la salud sigue en aumento, romper los estereotipos de género en la enfermería no es solo una cuestión de justicia, sino una necesidad urgente para construir sistemas de salud más resilientes y eficaces.