El viceministro Calvimontes anunció que el avión Hércules realizará mañana estímulos de nubes en la Chiquitanía, no solo para ayudar a extinguir los incendios restantes, sino también para combatir la sequía.
El viceministro de Defensa Civil, Juan Carlos Calvimontes, informó que el 90% de los incendios forestales en el departamento de Santa Cruz ya han sido sofocados, fruto del arduo trabajo de las Fuerzas Armadas, bomberos forestales y brigadas voluntarias, que han logrado reducir el impacto del fuego, especialmente en las zonas más afectadas de la Chiquitanía.
“Ayer se definió que el 90 por ciento del fuego ya está completamente liquidado. Quedan algunos puntos con humaredas que se están atacando tanto por tierra como con operativos aéreos planificados para el día de hoy”, destacó el viceministro en entrevista con Bolivia Tv.
En ese contexto, reafirmó la lucha del Gobierno nacional hasta sofocar completamente los incendios forestales e indicó que “las actividades no van a parar”.
La autoridad recordó que, en los días más críticos, los incendios afectaron cinco departamentos y 29 municipios, con hasta 70 focos de calor simultáneos. “Habíamos anunciado que en 10 días íbamos a controlar los incendios en Santa Cruz, y ya estamos en el noveno día con el 90% sofocado”, añadió Calvimontes.
Además, mencionó que el avión Hércules realizará a partir de mañana estímulos de nubes en la Chiquitanía, no solo para ayudar a extinguir los incendios restantes, sino también para combatir la sequía en municipios que necesitan desesperadamente agua.
El viceministro elogió el esfuerzo de las Fuerzas Armadas, que han movilizado más de 6.500 bomberos forestales y realizado miles de operativos aéreos y terrestres. También felicitó a los bomberos voluntarios y comunarios que han participado en esta batalla para salvar los bosques del país.
Calvimontes subrayó que se debe iniciar una campaña para identificar a los responsables de los incendios, incluyendo a grupos con intereses políticos y económicos, así como a productores que buscan expandir sus tierras de cultivo y pastoreo mediante el uso irresponsable del fuego.