Ningún departamento reporta alerta roja y las alertas naranjas están activadas para 308 municipios en el país; 87 de ellos están en La Paz
El Gobierno nacional ya empezó a perfilar el plan poslluvias que será aplicado en el territorio nacional para la reparación de daños y estragos causados por las intensas precipitaciones en los nueve departamentos con riadas e inundaciones.
“Se está elaborando ya un plan poslluvias, plan que nos ha encomendado el presidente Lucho (Luis Arce). El Ministerio de Planificación (del Desarrollo) ya nos ha solicitado las primeras informaciones, las primeras evaluaciones que hemos hecho producto de estos desastres y se está, en este momento, en la búsqueda del financiamiento para encarar (…) porque este año ha sido un año mucho más fuerte, muy duro respecto a la gestión anterior producto de las lluvias”, informó el viceministro de Defensa Civil, Juan Carlos Calvimontes, en el programa Los hechos cuentan de Bolivia TV.
Los nueve departamentos del país fueron afectados por las intensas lluvias que provocaron el desborde de ríos e inundaciones, además de riadas y mazamorras.
Producto de las lluvias, 52 personas perdieron la vida entre enero y lo que va de marzo, según datos estadísticos que dio a conocer Calvimontes.
Las alertas rojas en el país, que tenían a las ciudades de La Paz y Cobija como los principales sitios de riesgo por los desbordes de ríos por las lluvias intensas, disminuyeron, explicó el viceministro.
“Si hay algo positivo para esta semana es que el Senamhi (Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología) nos está emitiendo las alertas y esta semana, que va a regir hasta el 28 de marzo, han disminuido las alertas rojas. Por ejemplo, en este momento no hay ningún departamento en alerta roja, eso quiere decir que las lluvias van a disminuir, el caudal de los ríos también está disminuyendo. Solo existen 308 municipios con alerta naranja”, señaló la autoridad.
De los 308 municipios, 87 están en el departamento de La Paz; 47, en Cochabamba; 40, en Santa Cruz; 34, en Potosí; 29, en Oruro; 29, en Chuquisaca; 16, en Beni; 15, en Pando; y 11, en Tarija.
“De manera que este periodo va a significar que si bien van a haber lluvias, no van a ser muy intensas, pero eso no significa que bajemos la guardia, estamos en apronte con las Fuerzas Armadas y todas sus unidades militares. Esta semana, al parecer, será un periodo de disminución de las intensas lluvias porque se espera lluvias hasta mediados de abril”, manifestó Calvimontes.
A inicios de marzo, en la ciudad de La Paz, el Gobierno nacional activó un plan de reconstrucción con Bs 42 millones, conjuntamente con la gobernación y alcaldía, debido a las afectaciones por riadas e inundaciones producto de los desbordes de ríos.
El miércoles 20 de marzo, el presidente Luis Arce, en un encuentro con periodistas, manifestó que en el tema de la crisis climática el Gobierno nacional hizo grandes esfuerzos para enfrentar los fenómenos en los nueve departamentos, donde hubo afectaciones por las constantes lluvias.
“Hemos desplazado 875 toneladas de ayuda humanitaria en todo el país, además de gaviones, maquinaria pesada y herramientas, con una inversión cercana a los Bs 21 millones, cifra parcial considerando que seguiremos contribuyendo hasta que se resuelva la situación en todos los municipios afectados”, dijo en la Casa Grande del Pueblo.
Hay 247.834 familias perjudicadas
En Bolivia, 247.834 familias resultaron perjudicadas por las intensas lluvias, según informó el viceministro de Defensa Civil, Juan Carlos Calvimontes.
Las lluvias en el país destruyeron, hasta el momento, 1.495 viviendas, de acuerdo con el reporte oficial.
“En este momento tenemos ya registrados 174 municipios afectados, de los cuales 64 ya se han declarado en desastre municipal, 24 en emergencia municipal”, explicó la autoridad.
Las lluvias también dejaron 2.283 comunidades afectadas.
“(Hay) 187.176 familias afectadas, 60.658 familias damnificadas, en total son 247.834 familias (…) Lo más fuerte de la inversión, sin lugar a dudas, será apoyar en la parte productiva y también hacer un plan de reconstrucción de las viviendas que han sido damnificadas”, explicó en entrevista con el canal estatal Bolivia TV.
Calvimontes añadió que todos los gobiernos (nacional, departamental y municipal) deben contar con un plan de gestión de riesgos y atención de desastres, en los cuales se debe incorporar la parte preventiva, atención y reconstrucción posevento.
“Estos planes nos permiten además contar con un financiamiento con recursos económicos que nos posibilitan ejecutar los recursos en el momento en que se necesiten por parte de los equipos de primera respuesta. Tenemos que estar todos en apronte, debemos de tener la capacitación permanente para trabajar en distintos eventos. Cuando se interviene, tenemos que ver primero la seguridad del personal que va a intervenir y luego contar con todos los medios logísticos para que la atención sea eficiente”, indicó Calvimontes.
Recordó que el Viceministerio de Defensa Civil tuvo la capacidad de llegar a los sitios afectados por inundaciones y otros estragos de manera inmediata, a través de los equipos de respuesta rápida y con el traslado de ayuda humanitaria; además de trabajos de prevención o rehabilitación, como se los ejecutó en la zona Sur de La Paz.//Ahora el Pueblo