Liberaron a 2.500 crías de tortugas, con el propósito de ayudar al repoblamiento y conservación de la especie, en la cuenca del río Manuripi, en la Reserva Nacional de Vida Silvestre Amazónica del mismo nombre, en el departamento de Pando.
“La liberación de petas (tortugas) en el río Manuripi, para demostrar al país y al mundo el compromiso de los bolivianos y pobladores de las comunidades indígenas de cuidar las áreas protegidas”, afirmó el director nacional del Servicio Nacional de Áreas Protegidas (Sernap), Jonhson Jiménez.
La liberación de las petas fue el fin de semana, en el puesto de control de San Silvestre, a 120 kilómetros de Cobija.
La peta de agua dulce es una especie amenazada por la sobre explotación de los huevos y la captura de las madres en los ríos para su comercio ilegal. Además, la especie es afectada por la contaminación en los acuíferos, la contaminación atmosférica y el cambio climático.
Con el proyecto de repoblamiento se recolectan los huevos de nacimientos naturales y de los decomisos que se hacen en patrullajes, para luego ser llevados a las playas artificiales y su incubación con proyección a lograr la eclosión de la mayor cantidad.
Las tortugas (Podocnemis unifilis) habitan en la región amazónica de Bolivia y son fundamentales para el mantenimiento del equilibrio ambiental.
La actividad contó con la presencia de autoridades de la Universidad Amazónica de Pando, representantes del sector indígena, comité de gestión del área protegida y moradores de la Reserva Nacional de Vida Silvestre Manuripi.