
Timo Grönlund, el esquiador finlandés nacionalizado boliviano, ha vuelto a hacer historia al clasificar a Bolivia para los Juegos Olímpicos de Invierno Milán-Cortina d’Ampezzo 2026. Este será el tercer ciclo consecutivo en el que Grönlund representará al país en la máxima cita de los deportes de invierno, consolidándose como un referente del esquí cross country.
Un camino de esfuerzo y dedicación
Grönlund, de 37 años, logró su clasificación en la prueba de 10 kilómetros durante el Campeonato Mundial de Esquí Nórdico celebrado en Noruega. En una competencia reñida, el deportista terminó en el puesto 19 entre 88 participantes, con un tiempo de 22 minutos, 53 segundos y seis décimas, asegurando así su cupo olímpico.
Este logro no es casualidad. Desde finales de 2022, Grönlund ha competido en más de 60 eventos en países como Finlandia, Noruega, Alemania, Suecia, Austria, Eslovaquia y Brasil, acumulando los puntos necesarios para su clasificación. Su dedicación y esfuerzo han sido clave para mantener a Bolivia en el escenario olímpico.
Una historia de amor con Bolivia
Casado con la boliviana Leny Huaman desde 2011, Grönlund adoptó a Bolivia como su segunda patria y comenzó a representar al país en 2017. Desde entonces, ha participado en dos ediciones de los Juegos Olímpicos de Invierno: Pyeongchang 2018 y Pekín 2022. En ambas ocasiones, compartió la representación boliviana con Simon Breitfuss, otro esquiador de renombre.
Más allá de los 10 kilómetros
Aunque ya tiene asegurada su participación en los 10 km, Grönlund no se detiene. Su próximo objetivo es clasificarse en las otras tres distancias del cross country: 1.5, 20 y 50 kilómetros. “Voy a seguir compitiendo. En abril habrá cuatro competencias más, y durante el verano europeo también. Quiero seguir representando a Bolivia y lograr más clasificaciones”, afirmó el esquiador.
El apoyo de la FEBSA
La Federación Boliviana de Esquí y Andinismo (FEBSA) ha sido un pilar fundamental en la carrera de Grönlund, brindándole el respaldo necesario para competir a nivel internacional. Además de Grönlund, otro boliviano, Paolo Vargas, también aspira a clasificarse en las pruebas de fondo, lo que podría significar una mayor presencia boliviana en los Juegos Olímpicos de 2026.
Bolivia en los Juegos Olímpicos de Invierno
La participación de Grönlund en Milán-Cortina d’Ampezzo 2026 marcará la octava ocasión en que Bolivia esté presente en los Juegos Olímpicos de Invierno. La primera fue en 1956 en Cortina d’Ampezzo (Italia), seguida de participaciones en Lake Placid 1980 (Estados Unidos), Sarajevo 1984 (antigua Yugoslavia), Calgary 1988 (Canadá) y Albertville 1992 (Francia). Tras un largo paréntesis, Bolivia regresó en 2018 y 2022, y ahora se prepara para seguir haciendo historia en 2026.
Con su clasificación, Timo Grönlund no solo refuerza su legado como deportista, sino que también inspira a nuevas generaciones de bolivianos a seguir sus pasos en los deportes de invierno, demostrando que con dedicación y perseverancia, cualquier meta es posible.