El periodista español Alejandro Entrambasaguas publicó un reportaje el fin de semana en el madrileño El Debate en el que vincula a Evo Morales con casos de estupro, violencia de género y presunto encargo de asesinato.
Entrambasaguas, que accedió a documentación privilegiada sobre el caso en 2020, confirmó las graves acusaciones que pesan sobre el dirigente cocalero por delitos de estupro, trata de personas, y agregó el de violencia de género.
La Fiscalía de Tarija activó una investigación a Morales por abusos sexuales cometidos presuntamente contra adolescentes menores de edad, pero el reportaje advierte de que altos cargos policiales vinculados al expresidente ocultaron las pruebas hasta ahora.
Uno de los casos destacados en la investigación es el de Cindy Saraí Vargas, quien supuestamente mantuvo una relación con Morales desde los 14 años y tuvo un hijo con él cuando ella era menor de edad.
El acta de nacimiento del menor, nacido en 2016, identifica a Morales como el padre. El Debate reporta que tras el nacimiento varios familiares de Vargas fueron contratados en instituciones públicas bolivianas, en un posible intercambio de favores.
“Entre 2015 y 2019, la etapa en que Evo mantuvo una relación sentimental con Cindy Saraí, la menor realizó un total de ciento cuarenta vuelos nacionales por Bolivia, extremo que choca a los agentes como consecuencia de los nulos ingresos económicos que tenía por aquel entonces la joven. De todos los viajes que hizo, cincuenta fueron acompañados del bebé y el resto en solitario. La totalidad del precio de todos estos pasajes fue de 110.732 bolivianos (al cambio 13.841,49 euros), una cifra inusual que pudiera ser gastada por una niña de familia humilde”, precisa El Debate.
NOEMÍ
El segundo caso involucra a Noemí Meneses, una joven con la que el dirigente cocalero habría mantenido una relación desde sus 14 años.
Documentación extraída de su teléfono, incautado durante una intervención policial, incluye fotografías de ambos en situaciones de pareja, así como mensajes de amor dirigidos a Morales. Además surgieron pruebas de presunta violencia, ya que la investigación obtuvo imágenes de Noemí con signos de agresión física, entre ellas una imagen con sangre que refuerza las sospechas de abuso físico.
“Cuatro años después de que comenzara la investigación policial, El Debate ha podido confirmar que una de las tesis que en su día tuvieron los agentes fue que Evo, presuntamente, agredía físicamente a las niñas en paralelo a los abusos sexuales”, asegura el medio español.
ENCARGO
El reporte también detalla la supuesta participación de colaboradores en los encuentros con las menores, como el militar Ruring River Covarrubias, quien confesó haber facilitado el traslado de menores para Evo Morales y afirmó que el expresidente le solicitó asesinar al entonces jefe de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC), coronel Iván Rojas.
También se señala a Hernán Solís Morales, primo de Evo, como otro de los intermediarios en los encuentros.
El reportaje de Alejandro Entrambasaguas se publica al mismo tiempo en que el expresidente, que se mantenía escondido en el trópico de Cochabamba, su bastión político, tras la supuesta emisión de una orden de captura en su contra, denunció un atentado contra su vida que generó dudas sobre su veracidad en ámbitos políticos y sociales.